En México, el gas licuado de petróleo (LP), utilizado por el 75 por ciento de la población, se emplea para la industria, la agricultura y los vehículos, aunque principalmente es empleado en los hogares para calentar agua, en la calefacción y la cocción de los alimentos.

El gas LP es distribuido mediante cilindros o pipas que surten a los tanques estacionarios de los hogares. Por su practicidad y por ser uno de los combustibles más usados en nuestro país, tiene mayores ventajas que algunos otros combustibles sustitutos.

Por esa razón, presentamos algunos de los beneficios que ofrece el gas LP para el consumidor y para la economía mexicana.

• Tiene más poder calorífico.
• No se cobra la renta ni instalación.
• No hay necesidad de romper calles para instalarlo.
• Existe mayor competencia.

El sector energético es uno de los más dinámicos a nivel internacional y México tiene un papel fundamental en la industria. Según estimaciones de la Asociación Mundial del Gas LP, más de mil millones de personas y negocios en todo el mundo utilizan este energético.

La industria del Gas LP se ha fortalecido y hoy en día México es el país con mayor consumo anual, con un promedio de 74 kilogramos per cápita. Tan solo el 75 por ciento de los hogares nacionales usan este gas.

Además, este combustible proporciona un servicio instantáneo, confiable, constante y juega un papel importante al evitar la tala y deforestación de los bosques.

Así, el Gas LP está presente en la vida diaria de más de 90 millones de mexicanos por sus ventajas sobre otros energéticos. Gracias a su transportación y su alto poder calórico, resulta económico y juega un papel fundamental en México por ser un motor del crecimiento económico.

Redacción