El GLP o Gas Licuado del Petróleo es un combustible muy demandado en la actualidad como alternativa a la gasolina, puesto que su uso reduce las partículas contaminantes. Todos los motores de gasolina pueden ser modificados fácilmente para el uso de GLP. También es frecuente su uso en aplicaciones industriales.
Diariamente escuchamos las distintas facilidades y ahorro económico para utilizar el combustible denominado GLP – AutoGas o Gas Licuado del Petróleo. Para el Sector Primario se le ofrece poder ser más competitivo al mejorar sus costes de explotación, puesto que puede ser utilizado generadores de energía para las más variadas aplicaciones, como puede ser el secado de distintos productos, control de temperatura de granjas criadoras de animales, congeladores, accionamiento para distintos tipos de maquinaria. Pero además, este combustible destaca por su compromiso con el desarrollo sostenible de nuestro planeta en general.
El combustible denominado GLP, se compone principalmente por gas propano y gas butanos disueltos, ambos, en petróleo. La proporción, aproximada es del 70% de butano y de un 30% de propano. Además lleva consigo una serie de procesos químicos y físicos, incluido el gas metano.
Se trata de un gas que se licua a baja presión con parámetros entre 60 y 120 psi, aproximadamente. El “psi” mantiene su referencia con la unidad libra, unidad de masa, por pulgada cuadrada y su equivalencia sobre el kilogramo es: 1 kg. de presión es igual a 14,5 psi. Siempre en estrecha relación de la propia mezcla del propano y del butano. Su propia capacidad de expansión de estado líquido al gaseoso, aumenta su volumen unas 270 veces, lo que le hace más atractivo.
El GLP, almacenado correctamente en nuestro vehículo puede aguantar temperaturas extremas que van desde los -400 grados hasta +650.
Componentes de un equipo GLP
Los principales componentes de un equipo para poder utilizar el Gas Licuado del Petróleo, incorporados en un motor de gasolina, son un depósito homologado, caja estanca, toma de carga específica exterior, conmutador, ECU, boquillas del colector de admisión, bloque de inyectores, filtro, electro válvula de corte, sensor de temperatura, evaporador-reductor, mangueras y tuberías. Siempre debidamente homologados por Industria y montados, de no ser en origen, por personal cualificado y autorizado para efectuar este trabajo, además el vehículo debe presentar el certificado de montaje de la instalación citada.
También deben contar con la función ECU, es decir, la centralita o unidad de mando electrónica que mantiene la relación estequiométrica (aire-gas), de forma proporcional durante el funcionamiento del motor, adaptándose a sus necesidades puntuales de trabajo. Concretamente define la combustión perfecta dentro de la cantidad exacta de oxígeno y combustible para que se consiga la mayor cantidad de calor cuyos resultados serán el CO2 o H2O, debidamente controlados.
El vehículo que utilice este combustible, siempre arrancará con combustible de gasolina hasta que el motor alcance la temperatura adecuada para que el combustible GLP, actúe de forma totalmente efectiva.
Normalmente el depósito se monta en el lugar de la rueda de repuesto, siendo sustituida por un KIT, homologado, de repara pinchazos. También se valora su protección y la posibilidad de manipulaciones, no deseadas, por personas no expertas. Cuando se habla de inyectores dentro de los elementos necesarios en un motor con GLP, es necesario puntualizar que se refiere a los elementos encargados de inyectar el gas, en la adecuada proporción, directamente en el conducto del aire de admisión del motor.
La centralita actúa de forma coordinada con las exigencias y prestaciones del motor, proporcionando la dosis de gas precisa. El Conmutador, es el mando de control que se instala en el salpicadero del propio vehículo, el cual hace operativo el modo en el que se activa –Gas o Gasolina– también nos informa del nivel de gas del que disponemos.
Uso del GLP
El combustible denominado GLP o Autogas, es muy utilizado en países como Italia, Alemania, Francia, Polonia o Rumania, y mucho más que en España. Su precio medio actual es de 0,65/0,70 euros por litro, pero si viajamos por Europa con nuestro vehículo, debemos tener muy presente los distintos tipos de adaptadores que se utilizan para repostar, pues no todos los países utilizan la misma normativa.
El combustible GLP, también es utilizado en las autocaravanas, atendiendo servicios de cocina, nevera, calefacción y agua caliente. Lo cómodo es que tan solo se precisa llenar tu propio depósito o bombona en cualquier gasolinera o punto de suministro autorizado.
El combustible GLP, es, actualmente, el combustible alternativo más demandado a nivel mundial. En muchas empresas podemos comprobar que distintas carretillas elevadoras, disponen de un depósito adicional en su parte trasera superior lo que las permite trabajar en recintos cerrados evitando la contaminación ambiental.
También influyen los acuerdos para que este combustible resulte más barato que la gasolina, por ejemplo, en principio hasta el año 2023 en toda la Unión Europea, lo que ocurra después estará por decidirse.
Montaje de una instalación de GLP
La instalación de un KIT de GLP, en nuestro vehículo con motor de gasolina, puede ser una alternativa interesante, incluso para obtener la etiqueta “ECO”, tan necesaria para circular dentro de las grandes urbes.
Nuestro vehículo debe mantener técnicamente las líneas de igualar o superar la normativa EURO-3, es decir limita las emisiones de óxido de carbono, hidrocarburos y óxido nitroso, los cuales son gases perjudiciales para la salud y el medioambiente. Esta normativa se aplicó en enero del año 2000.
Nuestro vehículo debe llevar la etiqueta denominada “B”, concedida por la Dirección General de Tráfico (DGT).
En primer lugar nuestro vehículo ya equipado con el KIT citado, precisa el Certificado del Taller instalador autorizado, donde se describe la estanqueidad del circuito instalado y del correcto funcionamiento de todos sus componentes, además del nombre del fabricante y su código legal que le define apropiado para ser instalado en nuestro vehículo, citando marca, modelo, número de bastidor, número de motor y año de construcción. Posteriormente podemos iniciar los pasos que definirán nuestro vehículo como autorizado o preparado para pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), correspondiente. De resultar todo positivo, dentro de la normativa, podemos acceder a la identificación “ECO” para nuestro vehículo.
El montaje de un sistema, alternativo, de combustible tipo GLP, en nuestro vehículo, es considerado como una reforma de importancia elevada, por lo que cada paso a dar debe estar sujeto a la normativa oficial, el no hacerlo nos traerá problemas graves y sancionables.
Informémonos mediante el Reglamento número 115 de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa, documento que debe tener el Taller instalador junto con el Certificado de Autorización para instalar este KIT.
De existir cualquier otro paso legal a realizar nos lo debe indicar el propio taller instalador, según nos informan, pues pueden existir diferencias de apreciación según comunidades. Siempre debemos informarnos con el máximo detalle para que se garantice nuestra inversión, no lo olvidemos.
El coste medio según marca y características del vehículo modificado, nos informan, estará sobre los 2.700 euros, aproximadamente.
Historia de GLP
El combustible “GLP/Auto-Gas”, no es un descubrimiento actual, pues si retornamos a principios del siglo XX y leemos la vida profesional del químico estadounidense Walter Snelling, ya logró separar de la gasolina para posteriormente licuarlos al aplicar una presión no demasiado elevada.
Con el proceso citado surgió el denominado GLP (Gas Licuado del Petróleo), lo que permitía transportarlo como un líquido y también podía evaporarse como un gas, se cita el año 1911.
Llegada la década de los años 30, la demanda de GLP, sobre todo en Francia, mantuvo una demanda al alza, muy especialmente en ferrocarriles y en distintas plantas de procesado, lo que impactó en Estados Unidos y el avance en su consumo se aceleró.
La crisis del petróleo en el año 1973, favoreció la demanda de GLP, dando un paso importante en sus líneas de comercialización, analizando los productores y consumidores su interesante potencial económico.
La actual capacidad del proceso para obtener el combustible GLP, a nivel mundial, se ha extendido por la mayor parte de los continentes. Se estima que este combustible es utilizado, actualmente, por más de 30 millones de usuarios, pero cada año aumenta sin cesar.
Recordemos que un vehículo o motor estacionario que utiliza GLP, emite un 15% menos de óxido de carbono-(CO2), que un coche que utiliza gasolina en exclusiva y sobre el 80% menos de óxidos de nitrógeno que un diésel, también expulsa menos partículas contaminantes a la atmósfera.
La utilización del combustible GLP, produce una mayor duración efectiva del lubricante del motor, pues este combustible produce una cantidad, notablemente, inferior de residuos no deseados en el mismo, lo que también beneficia a la longevidad de nuestro motor.
Fuente: https://profesionalagro.com/noticias/glp-autogas-como-combustible-alternativo.html