Mediante un decreto presidencial, el Gobierno adjudicó permisos de exploración petrolera a la compañía estatal Ieasa, ex Enarsa. Buscarán recursos en la Cuenca Malvinas Oeste.
El Estado Nacional de la Argentina buscará petróleo y gas en las cercanías de las Islas Malvinas, que tiene en disputa con el Reino Unido de la Gran Bretaña.
Será a través de la empresa estatal Integración Energética Argentina (IEASA, ex Enarsa), a la que se le adjudicó un permiso de exploración costa afuera (off shore) en las áreas MLO 115 y 116 del Mar Argentino, que suman más de 9000 kilómetros cuadrados (km2) en la Cuenca Malvinas Oeste.
Así lo establece el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 389/2021 firmado por el presidente Alberto Fernández, en el que además revierte otras decisiones en materia de energía del anterior Gobierno, como la privatización de algunas empresas.
La porción del mar sobre la que trabajará la ex Enarsa en la sísmica 3D está a unos 320 kilómetros mar adentro de distancia de la costa de Tierra del Fuego y fuera del territorio en disputa con Gran Bretaña.
En 2015, Enarsa había detectado un importante volumen de recursos de gas por cerca de 3,63 TCF (trillones de pies cúbicos) frente a las costas de Chubut y Santa Cruz -Cuenca Austral Argentina-, después de realizar el trabajo de sísmica 3D.
En el bloque Calamar, la empresa estatal invirtió u$s 50 millones en exploración hace ya siete años. Ahora perforará tres pozos exploratorios para confirmar el descubrimiento y estudiar qué tan factible es producir gas en esa zona.
Según fuentes del mercado, el área está cerca de Carina y Aries, dos proyectos que tiene en producción la francesa Total Energies.
En áreas contiguas, la estadounidense ExxonMobil y Qatar Petroleum invirtieron más de u$s 100 millones para buscar recursos petroleros; y hasta la empresa inglesa Tullow Oil ganó la adjudicación de un permiso, lo que fue criticado por actuales funcionarios del Gobierno.
En mayo de 2019 se realizó la primera licitación de permisos de exploración petrolera en el Mar Argentino, que tuvo ofertas por hasta u$s 1000 millones.