Imagen: EPBR

La Petrobras continúa con el suministro de gas licuado de petróleo (GLP) desde la Refinería Alberto Pasqualini (Refap), en Canoas (RS), a pesar de la interrupción de la operación de una de las unidades de procesamiento del energético. La parada ocurrió en medio de las inundaciones que afectan al estado, lo que llevó a un acumulación de existencias de gas de botella.

Según la estatal, la refinería sigue operando y atendiendo la demanda de los demás productos, pero la unidad de GLP tiene un alto volumen de existencias debido a la reducción en la actividad de las empresas envasadoras.

La retirada del gas de cocina se ha detenido en los últimos días debido a las inundaciones. Uno de los problemas es la falta de personal para el mantenimiento de las operaciones, ya que parte de los trabajadores viven en regiones afectadas. Otra cuestión es la dificultad para el transporte del producto por las carreteras.

El procesamiento se reanudará una vez que aumente la salida del producto, según Petrobras. La Refap atiende principalmente al estado de Río Grande do Sul, además de parte de Santa Catarina y Paraná, y también suministra a otros estados por cabotaje y destina el excedente para la exportación.

El Ministerio de Minas y Energía (MME) está organizando acciones para reanudar el transporte de GLP.

El martes (07/5), el MME informó que se transportaron 660 toneladas del producto desde la Refap. El punto de equilibrio de la demanda se alcanzará cuando se transporten 850 toneladas.

Las empresas que operan en la región solicitaron la reapertura de las carreteras y la creación de rutas alternativas. La medida se considera esencial para dar salida a la producción de GLP, diesel, gasolina, queroseno de aviación (QAV) y asfalto.

Petrobras ha organizado un equipo de respuesta de emergencia en la región para apoyar a la fuerza laboral y está monitoreando los puntos que pueden afectar la operación de la refinería y la salida de combustibles, para garantizar la continuidad del suministro.

El lunes (6/5), Petrobras ya había informado que la Refap estaba operativa. El municipio fue uno de los más afectados por las inundaciones que afectan al estado de Río Grande do Sul.

El Ministerio de Minas y Energía (MME) informó que no hay escasez de combustibles en la Refap y la refinería opera con carga reducida, pero con exceso de existencias de combustibles.

«La reducción de la demanda de producto por parte de los distribuidores en la refinería se debe a las condiciones restringidas de acceso a las carreteras y a que algunas instalaciones de los distribuidores han sido afectadas por las inundaciones», dijo el lunes.

La Refap también es autosuficiente en energía eléctrica y su operación no está expuesta a apagones de subestaciones o cortes en el suministro de energía, según informa la pasta.

Fuente: EPBR