Una importante inversión ampliará la infraestructura de gases líquidos renovables, apoyará a los hogares y negocios rurales, y reducirá las emisiones de carbono hasta en un 90% para 2030.
El sector de gas licuado (GLP) de Irlanda del Norte invertirá 50 millones de libras esterlinas a nivel local hasta 2030 en áreas como infraestructura de energías renovables y generación de empleo.
La inversión apoyará a los actuales usuarios de GLP y de gasóleo para calefacción doméstica, así como a empresas e industrias, para avanzar hacia un futuro de Cero Emisiones Netas.
Alrededor de 15.000 hogares en Irlanda del Norte dependen actualmente del GLP como su principal fuente de calefacción. Su uso se concentra principalmente en hogares y negocios rurales que no están conectados a la red de gas natural.
Gran parte de la inversión respaldará la producción y la expansión de los gases líquidos renovables, como el bioGLP, que ofrece la misma eficiencia y beneficios en calidad del aire que el GLP convencional, pero con un 90% menos de emisiones de carbono.
El éter dimetílico renovable (rDME) también representa una solución alternativa rentable y de fácil incorporación frente al gas y el diésel, con hasta un 85% menos de emisiones de carbono, y es particularmente útil para hogares que actualmente dependen de combustibles sólidos como el petróleo y la leña.
En un evento celebrado hoy (lunes) en Stormont, George Webb, director ejecutivo de Liquid Gas UK, afirmó:
“El anuncio de hoy sitúa al sector del GLP de Irlanda del Norte a la vanguardia en la preparación hacia un futuro de Cero Emisiones Netas, con gases líquidos renovables que pueden reducir drásticamente las emisiones de carbono hasta en un 90%.
Actualmente, más del 70% de los hogares en Irlanda del Norte y muchos negocios rurales no tienen acceso a la red de gas. El anuncio de hoy facilitará la transición primero hacia el GLP y luego hacia los gases líquidos renovables.
Los gases líquidos renovables también pueden abordar el costo de la transición, la mayor barrera hacia un futuro de Cero Emisiones Netas. El costo inicial de instalar una bomba de calor o una caldera de biomasa en un hogar rural típico de Irlanda del Norte puede ascender a 19.000 libras.
En comparación, el costo de cambiar a una caldera de GLP lista para renovables es diez veces menor, apenas 1.900 libras, lo que la convierte en la forma más eficaz de descarbonizar hogares y negocios fuera de la red de gas.”
Liquid Gas UK estima que cambiar los hogares de Irlanda del Norte que dependen del gasóleo para calefacción, combustibles sólidos y leña hacia GLP y posteriormente a gases líquidos renovables reduciría las emisiones de carbono en aproximadamente cinco millones de toneladas anuales.
La asociación también publicó una nueva investigación que muestra que el 80% de los consumidores rurales encuestados considera que el Ejecutivo de Irlanda del Norte ha pasado por alto los desafíos energéticos únicos que enfrentan las comunidades rurales. Además, el 82% señaló que no se ha brindado suficiente apoyo a los propietarios rurales para descarbonizar sus sistemas de calefacción.
Asimismo, el 62% de todos los votantes apoya políticas que les permitan mantener su sistema de calefacción y radiadores actuales, sustituyendo únicamente la caldera por una lista para combustibles renovables.
Fuente: Newsletter.co.uk