La estabilidad regulatoria resulta necesaria para consolidar el Gas Licuado de Petróleo como una solución energética sostenible y esencial en la transición hacia fuentes más limpias.

En el umbral de 2025, el sector del Gas Licuado de Petróleo (GLP) en América Latina enfrenta importantes desafíos para consolidarse como un aliado en la transición hacia fuentes de energía más limpias. En conversación con Surtidores LatamFabrício Duarte, Director Ejecutivo de la Asociación Iberoamericana de Gas Licuado de Petróleo (AIGLP), destacó que la estabilidad regulatoria y la confianza de los inversionistas son pilares esenciales para garantizar el crecimiento sostenible de la industria.

“Para el año 2025, el sector sigue enfrentando el desafío de garantizar un marco regulatorio previsible y estable, que fomente la confianza de los inversionistas y permita la expansión de la industria en la región”, afirmó.

En este contexto, la implementación del GLP no solo contribuye a la reducción de emisiones contaminantes, sino que también mejora significativamente la calidad de vida de las comunidades más vulnerables.

“Nuestro objetivo es garantizar que el Gas Licuado de Petróleo permanezca como una solución esencial, segura, accesible y sostenible, desempeñando un papel estratégico en la transición hacia una matriz energética más limpia”, explicó el director de la AIGLP.

Duarte resaltó que la falta de normativas representa uno de los principales obstáculos para el desarrollo del sector. “Brindar un ambiente de certeza jurídica es esencial para el crecimiento de cualquier industria, y en este sector no es diferente”, subrayó. Sin embargo, advirtió sobre ciertas iniciativas en la región que generan inestabilidad y desalientan la inversión privada.

Entre las prácticas que generan preocupación están las propuestas que buscan controlar o incorporar infraestructura privada al dominio público, lo que podría alejar a los inversionistas externos.

Por otro lado, el GLP ha mostrado un avance notable como combustible vehicular en la región, impulsado por sus claras ventajas económicas, ambientales y operativas. Este crecimiento refuerza el potencial para diversificar su oferta y consolidarse como una alternativa energética competitiva en diversos ámbitos.

Con la promoción de un diálogo constructivo entre gobiernos, empresas y otros actores, la AIGLP reafirma su compromiso de contribuir al desarrollo sostenible del sector y de la región. “La colaboración y el intercambio de mejores prácticas son fundamentales para garantizar que el GLP siga siendo una solución energética indispensable en América Latina”, concluyó Duarte.

Fuente: Surtidores Latam – Sol Bermo