Como ya se sabe, actualmente, hay dos tipo de energía: las no renovables (los combustibles fósiles y la energía nuclear) y las renovables, las cuales provienen de plantas (la biomasa/GLP renovable) y de otras fuentes como hídrica, eólica, solar, geotérmica.
Eric Johnson, managing director de Atlantic Consulting (Suiza) hizo la claridad sobre que, aunque las personas suelen confundir renovables con Bio, son dos temas distintos. Por ejemplo, el gas GLP renovable es el biopropano, ya que tiene la misma molécula que el propano fósil así como el biobutano, pero proviene de una fuente diferente: grasa animal, aceites vegetales, biomasa y residuos de desechos; mientras que el fósil viene del crudo y del gas.
Hasta el momento hay ocho caminos diferentes que conduce esta industria del GLP renovable, dos de ellos son comerciales, pero el mayor camino es el HVO que es el aceite vegetal. Según Johnson, hoy en día el GLP renovable tiene una característica especial y es que tiene una huella minúscula de carbono. Generalmente, es un 80 % más baja que el GLP convencional o de origen fósil.
La intensidad de carbono del propano HVO es algo que puede oscilar a 102 gramos de CO2 por megajulio (MJ) de combustible por un valor de calentamiento menor; en cambio el fósil tiene aproximadamente 75 gramos.
“Yo sé que de 102gr a 75gr es un rango amplio, pero la mayoría de los biopropanos actualmente está entre en los 35gr y los 40gr de CO2 por MJ. Y por la diferencia del origen y la manera cómo se calcula la huella de carbono”, explicó el experto.
Entre tanto, Johnson aseveró que la capacidad global del GLP renovable, que es el biopropano HVO es de 5.000 toneladas por año; en contraste con el GLP fósil que tiene 320 millones de toneladas. Además, el crecimiento de 2018 a 2025 se espera que sea, aproximadamente, de 30 % al año; es decir, a una tasa de crecimiento muy alta, de acuerdo con el líder de Atlantic Consulting.
Para Johnson, el mercado principal está ahora en el autogas (para automóviles), ya que aún para la calefacción y para cocinar se necesita un mayor desarrollo.
“Con relación a costos y márgenes, son similares a otros biocombustibles; es decir, que requiere incentivos ya que la mayoría de los biocombustibles no funciona sin incentivos del gobierno. Hay que decir que la mayoría de la producción del GLP es un subproducto, no es un producto propuesto de del proceso”, señaló.
Por otro lado, se expuso que hay algunos desafíos regulatorios con relación acerca de los combustibles renovables en general. Cuando se habla de GLP renovable, aún hay “cierta ignorancia por parte de los reguladores y las normas, porque la mayoría ni siquiera saben qué es GLP y menos van a saber lo que es un GLP renovable”, manifestó Eric Johnson.
En segundo lugar, indicó que hay un tema de lo que se llama el debate de la comida para combustible, que es el uso de aceite, caña de azúcar, maíz y convertirlos en combustibles. Y en tercer lugar, apuntó que puede haber un debate para conocer cuál es la huella de carbono real de cualquier combustible: “eso se puede calcular de diferentes maneras, por eso, las personas tienen diferentes respuestas”.