La Sociedad Peruana de Gas Licuado (SPGL) informó que alertó a las autoridades del Gobierno peruano sobre lo que consideró “un crecimiento desmedido del contrabando interno de gas licuado de petróleo (GLP) en el país”.
Ello lo atribuyó a la estructura actual del Fondo de Estabilización de Precios de Combustible (FEPC) que considera dos tipos de GLP, uno envasado en balones y otro a granel con precios diferenciados.
Esta es una distinción (diferenciación de precios de un mismo producto) que no existe en ningún otro país de la región, según indicó el mencionado gremio, que agrupa a las empresas envasadoras del citado producto.
“La situación actual, donde solo el GLP envasado en balones, que se usa en hogares, forma parte del Fondo de Estabilización de Precios de Combustible (FEPC), fomenta que una serie de agentes inescrupulosos compren GLP declarándolo envasado a un precio menor”, aseveró.
Desvío como producto a granel
Según indicó, lo estarían realizando dichos agentes, para luego vender el GLP (que reciben para su despacho como envasado), a un precio más alto como granel, producto usado fundamentalmente por industrias (y vehículos).
Según el gremio, hacer esta distinción y mantener solo al GLP envasado en el FEPC estaría afectando a las empresas formales. “En la actualidad existe una competencia desleal donde se perjudica a las empresas formales y se pone en riesgo la seguridad de la comercialización“ agregó la SPGL.
Consumidores
Más de ocho millones de hogares usan balones de GLP como combustible en el país, mientras que más de 650 mil vehículos basan su funcionamiento en este producto, anotó.
El gremio considera fundamental para acabar con esta aparente práctica de contrabando interno que calificó de ilegal y peligrosa, que el Gobierno considere al GLP como un producto único sin distinciones de uso.
Pide además que se mejore la metodología del FEPC, de forma que funcione como un verdadero fondo de compensación que contribuya a estabilizar el precio del GLP para evitar incrementos de precios bruscos.
De esa forma, propone que, cuando el precio este a la baja, el fondo se alimentaría de recursos de los productores, de manera que al final no genere costo al erario nacional.
Fuente: Gestión.pe