Ecopetrol y operadores privados realizarán compras por unas 10 mil toneladas mensuales, para suplir la demanda interna.

El mercado de Colombia mueve sus fichas en función de lograr la cantidad de GLP suficiente para abastecer con normalidad la demanda interna y no caer en el desabastecimiento, como ocurrió el año pasado.

Por el momento el Gobierno Nacional decidió racionalizar la venta y además autorizo a Ecopetrol, la petrolera pública, a incrementar la importación de producto de terceros mercados.

La demanda actual es cercana a las 50.000 toneladas mensuales. Esta cantidad se distribuye en 3,5 millones de hogares, unas 12 millones de personas, además de las industrias y comercios que utilizan este energético.

Las medidas gubernamentales se sustentan porque la Refinería de Barrancabermeja de Ecopetrol redujo en un 35% la producción de GLP. Lo que implica que la demanda interna no está abastecida por la producción local. Esa merma se debe a que se butanizó las naftas y el diesel y redujeron producto a refinar para propano y butano.

Para suplir ésta situación, el Gobierno autorizó a Ecopetrol a importar, y ya lo empiezan traer otras cinco compañías de distribución (de 4.000 a 6.500 toneladas por mes) y de otras firmas adicionales (de 3.000 a 4.500 toneladas por mes). Ésta importación encarecerá el precio final del producto en un 11%, estimaron los distribuidores en distintos periódico colombianos.

Alejandro Martínez Villegas, presidente de Gasnova, una de las entidades que agrupan a los envasadores, estimó que las importaciones de este combustible pasarán de representar 10,4% de la demanda al 22%.

En forma paralela a las compras en el exterior, el Ministerio de Minas y Energía, de Colombia, emitió un proyecto de resolución “por la cual se declara racionamiento programado de gas licuado de petróleo, GLP, y se dictan otras disposiciones”.